Existen una gran cantidad de mitos y creencias sobre los paneles solares, al grado de que ésto puede llegar a generar miedo e inseguridad al momento de considerar instalar un sistema para tu hogar. Aquí te ayudamos con ese proceso aclarando algunos de ellos.
1.- Tener paneles solares es muy costoso.
El costo de un sistema de paneles depende totalmente de nuestros hábitos de consumo. El precio de tu sistema será distinto al de tus vecinos, ya que ellos tienen distintos hábitos de consumo, por lo que ésto puede variar mucho.
Sin embargo, debido a la popularidad de éstos sistemas, el costo de los paneles se ha reducido en más de un 50% en los últimos cinco años, por lo que la inversión inicial es menor y el retorno es más rápido, además de que existen diferentes opciones de financiamiento.

2.- Toma mucho tiempo recuperar tu inversión.
El tiempo de retorno de inversión promedio de un sistema de paneles solares para una casa es de 3 a 5 años, y el tiempo de vida garantizado de los paneles, generalmente, es de 25 años. Ésto no quiere decir que a los 25 años dejen de funcionar, simplemente van reduciendo gradualmente su capacidad de producción una vez pasado este tiempo.

3.- No funcionan si está nublado o lloviendo.
Uno de los mitos más populares, sin embargo, una gran mentira.
Los paneles solares utilizan el espectro visible de la luz, el cual puede ser captado por el sistema aún con nubes y lluvia. De manera que, los paneles continúan funcionando y únicamente reducen su potencia en una cantidad mínima.

4.- No son legales.
Esto es totalmente falso, ya que gracias a la resolución que emitió la Comisión Reguladora de Energía (CRE) en 2007, es posible instalar tu propio sistema en tu casa o negocio y realizar un contrato de interconexión con la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
5.- Necesitan baterías para funcionar.
Los paneles solares se pueden usar de dos maneras:
- Interconectados a la red eléctrica: Se conectan directamente a la red y sirven para disminuir el costo de la electricidad que pagarías normalmente, sin utilizar baterías.
- Aislados: Ésto aplica mayormente para ranchos o comunidades alejadas en donde las líneas de CFE no se encuentren disponibles, en éste caso se pueden adquirir baterías para almacenar el excedente de energía y el sistema funciona de manera autónoma, sin embargo habrá que reponer las baterías cuando el tiempo de vida de ellas termine, por lo que el costo de éstos sistemas suele ser más elevado.
6.- Requieren de mucho espacio para instalarse.
Esto depende totalmente del número de paneles que necesites. Usualmente son instalados en los techos, con la finalidad de aprovechar espacios que no se utilizan y obtener el mejor rendimiento sin interferir con la vida diaria.

7.- Instalarlos es muy complicado y tardado.
En el mercado hay distribuidores capacitados que te brindarán ayuda en esta tarea. Estos distribuidores están especializados en el tema y no tardarán mucho en realizar la instalación de tu sistema.

8.- Son inseguros.
Normalmente son asegurados a una estructura fija que los mantiene siempre en su lugar y los paneles están protegidos con distintas placas y recubrimientos que evitan que se dañen por eventualidades, por lo que son equipos completamente seguros.

9.- El mantenimiento es muy costoso.
El mantenimiento es básicamente nulo, ya que sólo se necesita limpiarlos periódicamente.

10.- Solamente le funcionan a las empresas.
Muchos creen que estos sistemas sólo le funcionan a las grandes empresas debido al costo o al espacio que se necesita para instalarlos, pero esto también es falso, ya que el crecimiento de este tipo de tecnologías en los hogares cada día es mayor.
Esos son 10 de los mitos más populares sobre a los paneles solares, sin embargo, como ves, todos son falsos y únicamente buscan desprestigiar el uso de esta energía que otorga muchos beneficios tanto para el usuario como para nuestro planeta.
